Guardias trabajan en una prisión vacía ante reconversión a centro de migrantes

El sistema penitenciario de Texas se encuentra escaso de personal, sin embargo, 147 Guardias se encuentran trabajando en una cárcel completamente abandonada después que los reclusos fueron transferidos a otros lugares.

Fueron más de 1,000 prisioneros en la Unidad Briscoe del Sur de Texas los transferidos a otros calabozos estatales hace semanas, luego que el gobernador Greg Abbott anunciara sus planes para convertir una cárcel estatal para inmigrantes que cruzan la frontera entre Estados Unidos y México ilegalmente.

Los presos serían migrantes que enfrentan, pero no condenados, cargos criminales estatales.

Los 147 oficiales de Briscoe se encuentran bajo capacitación para ser certificados como carceleros, en tanto, la prisión permanece en "modo de mantenimiento".

Los uniformados continúan esperando más instrucciones, según un portavoz del Departamento de Justicia Criminal de Texas.

"Si bien asegurar la frontera es responsabilidad del gobierno federal, Texas no se quedará de brazos cruzados mientras esta crisis crece”, dijo Abbott meses atrás en un comunicado, informando la noticia de la cárcel para migrantes.