"No era un monstruo" declara madre de Salvador Ramos

Adriana Reyes, madre de Salvador Ramos, el asesino de la primaria de Uvalde, Texas, declaró que su hijo "no era un monstruo" aunque en ocasiones podía ser agresivo.

Adriana también manifestó su solidaridad con las familias de los niños asesinados, y reiteró que no sabía nada sobre los rifles que su hijo había adquirido.

"A veces tuve una sensación de incomodidad, como de ¿Qué estás haciendo?, Podía ser agresivo... Si realmente se enfadaba", declaró Adriana Reyes.

Los compañeros de clase de Salvador dijeron que Salvador era conocido por pelear con otros sus compañeros y amenazarlos.

También dijeron que en los últimos dos años, Salvador Ramos comenzó a exhibir comportamientos perturbadores, amenazando directamente a una persona y acosando a otras.

Afirmaron también que  él mismo se hacía heridas en el rostro, y que él solo se las curaba.

Además de matar a 21 personas, Salvador dejó 17 heridos. Al arribo de la Policía Fronteriza Ramos fue abatido.